ROBIS TEROL 60 cápsulas

Los fitoesteroles o esteroles vegetales son compuestos presentes de forma natural y en muy pequeña cantidad, en los aceites vegetales. Actúan inhibiendo la absorción intestinal del colesterol, consiguiendo aumentar el consumo de colesterol endógeno y por lo tanto, disminuyendo sus niveles en sangre.
A su vez, compiten en su absorción con el colesterol, por lo tanto cuando se incorporan a nuestro organismo, su efecto será hipocolesterolémico; es decir actuaría “bajando el colesterol”.
El colesterol no es soluble en la sangre y para circular necesita ser transportado por proteínas específicas ( LDL colesterol y HDL colesterol ).
Las lipoproteínas LDL transportan la mayor parte del colesterol “malo”, llamado así porque desempeña un papel importante en la formación de placas de ateroma en las arterias, dando lugar a la arteriosclerosis. En todos los estudios en los que se ha observado una disminución de LDL-colesterol, se ha constatado una disminución del riesgo cardiovascular.
Las lipoproteínas HDL, ejercen una actividad depurativa del colesterol, pues lo transportan hacia el hígado protegiendo las arterias de la arteriosclerosis, de ahí que también reciba el nombre de “colesterol bueno”.
Los primeros fitoesteroles fueron descubiertos en el germen de trigo, después se desveló su presencia en otras especies vegetales tales como el maíz, el olivo, la colza, la soja, las nueces y las semillas.
La buena tolerancia y ausencia de efectos secundarios hacen de ellos una alternativa para reducir el colesterol, tanto en población sana como en enfermos cardiovasculares. Análisis de tolerancia realizados en un gran número de estudios no revelan ningún efecto secundario, tomados incluso en grandes cantidades.
Dado que el colesterol es uno de los principales factores de riesgo de las enfermedades coronarias, se hace necesario su control. Los estudios realizados hasta el momento han demostrado que con el tratamiento farmacológico con estatinas, por cada dosis doblada se consigue un 6% de reducción del colesterol.
Sin embargo, los fitoesteroles consiguen una disminución de entre el 10 y el 15%, por lo que se convierten en un complemento adecuado.
La posibilidad de consumo de este producto como un ingrediente más de la dieta, puede tener un gran impacto sobre la prevención de las enfermedades cardiovasculares, especialmente la cardiopatía isquémica.
Ácidos grasos Omega 3: No todas las grasas son iguales. De hecho, mientras unas pueden provocar problemas de sobrepeso y diversas enfermedades cardiovasculares, otras lo evitan.
Nos referimos a los ácidos grasos OMEGA-3, con múltiples efectos beneficiosos para nuestro organismo. Los expertos en nutrición aconsejan cada vez más el consumo de pescados y alimentos ricos en ácidos grasos de la familia de los omega. No con pocas razones, ya que cada vez, avalados por más estudios de estos compuestos, podemos ver los beneficios que en el organismo producen. Son un tipo especial de ácidos grasos poliinsaturados que se encuentran principalmente en pescados azules y alimentos enriquecidos.
Fue una investigación realizada en Groenlandia hace tiempo la que puso de manifiesto las virtudes de los ácidos grasos omega-3. Científicos daneses observaron que los esquimales de aquella región del mundo presentaban una incidencia de muerte por problemas cardiovasculares ocho veces menor que la de los esquimales que habían emigrado a Dinamarca. Hicieron comparaciones y hallaron que los primeros tenían en sangre altos niveles de omega-3 debido a su elevado consumo de aceite de pescado y carne de animales marinos.
Empezaría así a estudiarse seriamente la influencia positiva de los ácidos grasos omega-3 en la prevención de la arteriosclerosis y otras dolencias coronarias.
La Asociación Americana del Corazón (AHA), fomenta el consumo de ácidos grasos Omega-3 procedentes de pescados y vegetales en individuos con hábitos de vida saludables para proteger el corazón, ya que contribuyen a que la sangre sea menos proclive a acumularse en coágulos que provocan los ataques cardíacos y que protegen contra los latidos irregulares (arritmias).
Los pescados contienen dos ácidos grasos Omega-3, el EPA (eicosapentanoico) y el DHA (docosahexanoico) y en vegetales tipo soja, nueces, tofu predomina otro ácido graso Omega-3, el alfa-linoléico.
El libro blanco de los Omega-3 realizado por el Comité científico del Instituto Omega y coordinado por los catedráticos José Mataix y Angel Gil de la Universidad de Granada determinan que el consumo de ácidos grasos Omega-3 es fundamental para la adecuada función pulmonar en personas sanas. En individuos con asma, disminuye la reacción de estos ante estímulos alergénicos y mejora los síntomas de los niños con asma bronquial.
PRINCIPALES PROPIEDADES DE LOS OMEGA-3
 Controlan el nivel en sangre de colesterol y triglicéridos.
 Reducen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, previniendo la formación de trombos y coágulos sanguíneos, mejorando el tono vascular.
 Ayudan a reducir la presión sanguínea, sobre todo si se padece hipertensión.
 Regulan el ritmo cardiaco.
 Son precursores de las prostaglandinas que intervienen en la agregación plaquetaria, previniendo la trombosis y la arteriosclerosis.
 Mantienen la flexibilidad de las arterias.
 Alivian el dolor y la rigidez en casos de artritis reumatoide y de gota.
 Ayudan a prevenir el cáncer de mama, próstata y colon, ya que reducen el crecimiento de las células cancerígenas y recuperan el sistema inmunológico de individuos con cáncer.
 Favorecen la salud del sistema nervioso y fortalecen el sistema inmune.

El selenio cuyo nombre proviene del griego selene (luna) es un mineral que nuestro organismo necesita solo en cantidades muy pequeñas, pero que cumple funciones muy importantes. A los minerales como el selenio se les llama oligoelementos. En todo el cuerpo solo tenemos aproximadamente 1 mg de selenio.
Fue el químico Sueco Berzelius quién descubrió y denominó este oligoelemento en 1.817, pero no se confirmó su esencialidad hasta los años cincuenta. Hoy en día se sabe que es un oligoelemento imprescindible en la dieta humana.
Presenta tanto una acción conjunta con la vitamina E como una función antioxidante independientemente de esta vitamina.
Por tanto el selenio es un nutriente esencial cuyo mecanismo de acción se explica por su pertenencia a la enzima glutatión peroxidas. Esta potente enzima antioxidante, presente en células y en plasma, desempeña importantes funciones de desintoxicación celular mediante la neutralización de los radicales libres, evitando su efecto nocivo sobre todos los órganos y tejidos del organismo.
Así el selenio:
 Tiene una función importante en la prevención de la arteriosclerosis y consecuentemente de sus complicaciones, de tipo cardiovascular (infarto de miocardio, accidentes vasculares), ya que contribuye a evitar el depósito de colesterol en los vasos.
 Contribuye a mantener la normalidad del sistema inmunitario.
 Frena los procesos de envejecimiento causados por la acción lesiva que los radicales libres ocasionan sobre las membranas celulares, dificultando de esta manera su óptima funcionalidad.
 En los últimos años diversos estudios han apuntado la posibilidad de que, el selenio contribuya a los mecanismos de reparación y mantenimiento del material genético dañado por diferentes agentes cancerígenos o mutagénicos, contribuyendo de esta forma a prevenir el desarrollo de diferentes tipos de cáncer.
La cantidad de selenio en los alimentos es variable e impredecible. Este oligoelemento es habitual en alimentos ricos en proteínas.
Con respecto a los vegetales, como los cereales, habría que puntualizar que para obtener una adecuada cantidad de selenio, deben haberse cultivado en tierras con una concentración suficiente de este elemento. Tampoco debemos olvidar que los alimentos que han pasado por un complejo proceso de manufacturación pierden en el camino gran parte de este oligoelemento.
Por ello son convenientes los suplementos de selenio, especialmente cuando existe riesgo de cáncer o enfermedades cardiovasculares.

Bajo el nombre de vitamina E se incluyen 8 sustancias diferentes del grupo de los tocoferoles y del grupo de los tocotrienoles. La más activa de todas ellas es el alfa-tocoferol.
Las fuentes de esta vitamina son: El germen de los cereales, especialmente el del trigo; las semillas de girasol; los frutos secos oleaginosos; y algunos frutos carnosos como la aceituna y el aguacate. La leche y la carne son muy pobres en esta vitamina.
FUNCIONES:
 Protege la integridad de las células y prolonga la vida.
 Antioxidante: Evita el enranciamiento de los aceites vegetales. En las células neutraliza la acción nociva de los radicales libres procedentes de la contaminación química y de la actividad del organismo.
8
 Potencia la acción de otros antioxidantes como las vitaminas A y C.
 Ejerce una acción protectora contra el cáncer y la arteriosclerosis.
 Interviene en la formación de las células germinales (espermatozoides y óvulos).
 Actúa impidiendo la oxidación de las grasas, lo que evita la arteriosclerosis y el deterioro de las membranas de las células. El selenio y otros antioxidantes potencian su acción.
Según su procedencia, existen dos tipos de suplementos de Vitamina E:
 Vitamina E sintética: Contiene solo l-alfa tocoferol, uno de los muchos tipos de tocoferol que existen en los alimentos dotados de acción vitamínica E.
 Vitamina E natural: Contiene además de d-alfa tocoferol, que es ligeramente diferente del sintético, otros tocoferoles como el beta, el gamma y el delta-tocoferol. Su acción es más potente que la de los suplementos compuestos de vitamina E sintética.
ROBIS-TEROL CONTIENE EXCLUSIVAMENTE VITAMINA E NATURAL.

Ingredientes

Ácidos grasos OMEGA-3 ....................................................... 250 mg
FITOSTEROLES ................................................................... 100 mg
Fibra alimentaria ...................................................................... 33 mg
Levadura de SELENIO ........................................................... 11 mg
VITAMINA E natural equiv. .................................................... 2,5 mg
Gelatina

Presentación

Envase con 60 cápsulas de 507 mg.

Laboratorio

Robis

Modo de empleo

Tomar diariamente 4 cápsulas repartidas en dos tomas, preferiblemente al final de la comida y la cena.
Se recomienda consumir durante 3 meses consecutivos, descansar 15 días y repetir. Destinado a personas que desean reducir su colesterol junto a una dieta equilibrada, incluido un consumo regular de frutas y hortalizas.

Precauciones de uso

No recomendado para mujeres embarazadas, lactantes y niños menores de 5 años.